S i l a e s p a d a d e D a m o c l e s c a y e r a s o b r e m i c a b e z a ,
s e a b o l l a r í a .



sábado, 26 de marzo de 2011

Salta a la vista



Ítaca permanecía quieta, tranquila, sentada en el banco enfrente de la casa de Xersa. La vieja mansión ardía como una gigantesca hoguera. Ni que fuera la noche de San Juan, diría Néstor de estar allí. Los ojos de Ítaca permanecían cerrados y jugueteaba en las manos con la venda azul que Troya le había dado para cubrirlos hacía un par de meses.


No podía ver las llamas, pero sentía el calor en la cara. Le costaba recordar cómo era exactamente la luz de un incendio. Anaranjada, pensó. Candente. Un poco azul en el centro.
Se sentía un poco sola. Desde que había perdido la vista siempre había estado rodeada de gente. Como Troya, que revoloteaba a su alrededor contándole todo lo que pasaba. En realidad a Ítaca le daba igual lo que sucediera a su alrededor, pero dejaba que su amiga siguiera hablando. La voz de la rubia Troya era reconfortante. Un poco nerviosa, siempre. Sonaba... A color azul. Sí. Indudablemente azul.


- Vaya, ni que fuera la noche de San Juan... - un suave silbido -. ¿Qué haces aquí sola?


Ítaca no sonrió. Se imaginó que lo hacía, pero no lo hizo. Sintió cómo Néstor se sentaba a su lado, lo suficientemente cerca como para sentir su calor sin llegar a tocarla. Él siempre era muy cuidadoso con cosas como ésa. Tocar a la gente. 


- Creo que ha sido culpa de Paris - susurró Ítaca.
- Maldito pirómano - masculló él.
- No sé qué es eso.
- Pues es... Mira, da lo mismo. ¿Jugamos al veo veo? 
- Estoy ciega, Néstor.
- Te doy ventaja. 


Troya solía regañarle cuando le oía meterse con Ítaca. Y lo hacía a menudo. "Dios, ¿has visto qué pintas lleva ese tío?". "No sé dónde he dejado mis llaves. ¿Las has visto?". "Mira, Ítaca. Mira, que te lo explico". "Niña, mírame cuando te hablo". "Lo que llevas no pega ni con cola. Ven, que ya te visto yo". "Salta a la vista, Ítaca. Salta a la vista".


Muchos creían que lo hacía por simple maldad, porque le gustaban las bromas fáciles y tener algo de lo que reírse a mano. Pero Ítaca le entendía mejor que nadie, así que nunca se enfadó. Ella sabía que Néstor era el único que estaba siendo justo con ella, tratándola como siempre lo había hecho, como si nada hubiera cambiado. Seguía buscando batallas verbales, seguía pinchándola. Seguía siendo el mismo.


- ¿Y si no vuelve? - preguntó Ítaca al cabo de un rato. Sintió la mirada de Néstor sobre ella -. ¿Y si no vuelvo a poder ver nunca?


El chico respiró hondo.


- Pues será una pena. Quiero decir... Yo me volveré cada día más y más guapo. Y tú te lo perderás. Vas a perderte esta maravilla.
- ¿Acabas de señalarte a ti mismo?
- Pero qué intuitiva eres. 
- Salta a la vista.
- Oh. Ahora mismo has sonreído.


Ítaca se llevó las manos a las mejillas, dejando la cinta sobre el regazo. Se repasó los labios con las yemas de los dedos.


- ¿De verdad?


Néstor tardó un poco en responder. Parecía haberse distraído con algo.


- No. Para nada.


5 comentarios:

  1. Para nada, pero para todo, ¿verdad?
    Me han gustado estos dos... Paris (o maldito pirómano)y Troya (la de las tragedias), y ahora que sabemos un poco más de ella, Ítaca y Néstor.
    ¿A qué color suena la voz de Néstor?

    ResponderEliminar
  2. "Lo que llevas no pega ni con cola. Ven, que ya te visto yo" Yo que ella si voy -derrame nasal-

    Yo no se ni que decirte a ti. Simplemente adoro todos tus retasos-de-algo, tu estilo es fantastico. Y tus personajes son la ostia, ya te lo digo.

    ResponderEliminar
  3. Pues a mi me gusta Néstor. Digan lo que digan. E Ítaca. Y ya los dos juntos aún más.
    Y sí, sería una pena que no volviera a ver. Aunque a lo mejor dejaría de ponerle colores a las voces. Y eso también sería una pena. Porque... no todos saben como suena una voz azul.

    ResponderEliminar
  4. Secundo la moción. Nestor es chachipiruleta (no pregunteees,no preguntes).
    "- Pues será una pena. Quiero decir... Yo me volveré cada día más y más guapo. Y tú te lo perderás. Vas a perderte esta maravilla."
    SOYFANSOYFANSOYFAN!
    Chica, cada día me gusta más como escribes!

    ResponderEliminar
  5. -Pues será una pena. Quiero decir... Yo me volveré cada día más y más guapo. Y tú te lo perderás. Vas a perderte esta maravilla.

    ¡Di que sí, hombre ya! Ay, que ganas de saber más de él me han entrado. Hay poca gente que le eche tantas narices.

    (Seh, el trozo ha molado demasiado)

    ResponderEliminar