S i l a e s p a d a d e D a m o c l e s c a y e r a s o b r e m i c a b e z a ,
s e a b o l l a r í a .



lunes, 25 de abril de 2011

Muerta pero legendaria


Lovely, you're always lovely
A vision
You were the one
Now I am stuck inside a memory
You forgot about our destiny
You buried me
Didn't you?



Me quedé mirando mi reflejo en la placa de metal que hacía las veces de mesa de trabajo para Kira. Esforzándome en no pensar en nada en absoluto, examiné mis ojos cansados. Aunque mantenía una expresión seria y completamente neutra, algo en mi aspecto sugería "derrota". Me enfurecí, golpeando la mesa con el puño.
- Si la rompes, la pagas - me advirtió Kira desde la puerta.
Me observaba con los brazos cruzados y las cejas levantadas. 
- ¿Qué haces? - preguntó.
Miré hacia otro lado, intentando ignorarla. Se había convertido en la voz de mi conciencia. Y lo último que quería hacer era escuchar a alguien que llevaba razón y lo sabía. 
Kira suspiró, acercándose a la mesa.
- Se ha despertado, Logan.
Dejó caer la bomba y yo acusé la catástrofe en silencio. Cerré los ojos un segundo. "Maldita sea". Ahora no tenía escapatoria. Había esperado tener más tiempo para... Para prepararme. Aunque ya sabía que para los desastres uno nunca está del todo preparado, había fantaseado con la idea de salir de esa sin un rasguño. 
- ¿No vas a ir a verla? - Kira arrastró un taburete y se sentó frente a mí, al otro lado de la mesa. 
- ¿Por qué? ¿Es que ha preguntado por mí?
- Logan.
- No.
Intentó cogerme la mano. La aparté.
- Está viva - susurró -. Deberías estar feliz. 
- Tú también lo has visto. Lleva el número IX. Ya no es ella, sólo es... Tiene su cara. Nada más.
- ¿Ya no es una leyenda? - preguntó Kira.
- Exacto - asentí.
- Ahora es sólo una chica normal, sola y asustada.
- Sí - musité.
- Así que no te alegras de que esté viva.
- No intentes... - negué con la cabeza -. No le des la vuelta a las cosas. 
Kira me miró sin decir nada y luego asintió. Se levantó.
- De momento será mejor dejarla descansar. No vayas a la enfermería. Lo último que necesita es a alguien que la prefería muerta pero legendaria cerca.
- Cállate.
- Contéstame, Logan. ¿Cuidarías de ella aunque no pudiera recordarte?
Fue entonces cuando la miré por primera vez desde que había entrado en el taller. Me di cuenta de que parecía tan cansada como yo. Puede que incluso más. Maldita fuera, ella y su manía de hacerme pensar. 
Sabía la respuesta. Me dolía como una puñalada, pero la sabía. Y era esa terrible certeza lo que más me molestaba, lo que no conseguía sacarme de encima. Tenía la sensación de que todo lo que había hecho había servido para nada. Estaba incluso peor que al principio. Pero lo sabía. Saber que tenía un problema era el primer paso para superarlo, ¿no?
"¿Sabes qué es lo que te pasa? Que estás esperando superarlo, Logan, pero no vas a poder. Abby era insuperable. Tienes que aprender a convivir con ello".
Resignación. Eso es lo único que le queda al héroe suplente después de perder todas las batallas, incluso las que tiene consigo mismo. Resignación.
- Sí. Cuidaré de ella - respondí entre dientes.
Una sonrisa cruzó el rostro de la mecánica.
- Me alegra oírlo - se dio la vuelta para marcharse. Antes de cruzar la puerta, fingió recordar algo repentinamente -. Ah, Logan, por cierto... - la miré y sonrió aún más -. Sí que ha preguntado por ti. Quiere verte.


Run me straight into the ground
Drowning deep inside your water
Drowning deep inside your sound



No recuerdo haber corrido más, más rápido, en toda mi vida. Resbalé un par de veces y mis dedos rozaron el suelo. Pero volaba. Volaba, nada podía pararme. Me gustaría haber visto a Leonardo en mitad del pasillo, intentando impedirme el paso. No habría podido.
La oí gritar antes de llegar a la enfermería.
- ¡Que me sueltes! ¡Suéltame de una puta vez, es una orden!
- ¡No he terminado de examinarte!
- ¡No me importa! ¡Suelta! ¡Tengo que ver a Logan, tengo que decirle...!
Abrí la puerta de golpe y se calló, mirándome. 
Me había olvidado de los dos trozos de carbón que tenía Abby Rhyback por ojos. Ardieron al verme y las lágrimas corrieron a sofocar el incendio. Imposible. Improbable. Indefinida. Insuperable.
Saltó de la cama, sacudiéndose a Bruma de encima. La agarré, abrazándola tan fuerte que podría haberla roto en dos. No sé si le dolió. No dijo nada. Yo tampoco. No sabía qué decirle. Había... No. No me había permitido ni soñar con volverla a ver de nuevo, así que no tenía ninguna preparación. Ninguna. Pero allí estaba, entre mis brazos, más pequeña de lo que la recordaba, con el pelo corto y la mirada más afilada que una navaja. No me atrevía a moverme, ni a respirar. Si desaparecía, me vengaría del mundo entero. Lo rompería. Todo. Trozo a trozo.
Quiéreme, Rhyback. Quiéreme aunque lo hagas mal, como un demonio. Quiéreme rápido, olvidándome al segundo siguiente. Me enfadaré. Pero será suficiente.
- Estás más alto - susurró.

6 comentarios:

  1. *-*

    Por fin, ahí están.
    Ains, en serio... estoy emocionada. Sin palabras.
    Abby es Abby... y Logan, puñetero Logan.

    Ains, que potito *.*

    Zagh

    ResponderEliminar
  2. "-Estás más alto."
    A mi eso me suena a gloria, y a Logan... ufff, a rock del bueno, o a un solo de los que te ponen la carne de gallina >//<
    Viva y legendaria, así es como queremos a Abby.
    Y, voy a seguir el ejemplo de Zima: Joder. JODER.

    ResponderEliminar
  3. M.I.E.R.D.A.
    WANDERER.

    Es lo único que viene a mi cerebro ahora.

    ResponderEliminar
  4. OH.JO.DER
    "Quiéreme, Rhyback. Quiéreme aunque lo hagas mal, como un demonio"
    Sin palabras. Yo tampoco estaba preparada para semejante catástrofe.

    (Yo había comentado aquí. Pero blogger decidió por su cuenta no publicarlo, al parecer)

    ResponderEliminar
  5. Sabes que yo no comento... pero esto me ha robado suficiente el corazón para hacerlo. Ay, lo tiene todo esta historia... espero que vayas soltando cachitos por aquí de ella :3

    PD. No sé cómo decírtelo, pero de verdad que me ha llegado este reencuentro .////.

    ResponderEliminar
  6. Ah.

    Precioso.

    No tengo palabras. Sigo leyendo, mejor dicho, devorando historias sobre Abby Rhyback. Y Logan.

    No me atrevía a moverme, ni a respirar. Si desaparecía, me vengaría del mundo entero. Lo rompería. Todo. Trozo a trozo.
    Quiéreme, Rhyback. Quiéreme aunque lo hagas mal, como un demonio. Quiéreme rápido, olvidándome al segundo siguiente. Me enfadaré. Pero será suficiente.
    - Estás más alto - susurró.

    ResponderEliminar