S i l a e s p a d a d e D a m o c l e s c a y e r a s o b r e m i c a b e z a ,
s e a b o l l a r í a .



jueves, 14 de octubre de 2010

Eres una víctima a largo plazo

-Voy a... reducirte a... nada -resolló. Una sonrisa salvaje le estiró los labios-. Cuando acabe contigo querrás saber cómo lo he hecho... Pero no podrás.

Ella le miró sin decir nada. Ladeó la cabeza y su pelo plateado emitió un débil destello antes de volver a quedarse quieto.

-Porque estarás hecha trizas -finalizó.
-Luchamos en el mismo bando, Kasdan.
-Que les jodan a los bandos -se empezó a levantar con esfuerzo. Llovía sangre sobre el cemento-. Esto es entre tú y yo, Letto.

Los ojos azules de la asesina se convirtieron en dos rendijas recelosas. Y eso que era ella la que llevaba la espada. Kasdan esbozó una sardónica sonrisa cruel. A Letto le gustó.

-Creía que tú nunca decías mi nombre.
-Y yo creía que nunca dejabas supervivientes, chicaluna.
-Todavía no he terminado contigo. Eres una víctima a largo plazo -devolvió la espada a la vaina, tranquila-. Te dejaré ir por hoy.
-Acabaré matándote -advirtió Kasdan, mirando la mano blanca, suave y en apariencia inofensiva que ella le ofrecía para ayudarle a levantarse.

Una pequeña sonrisa por parte de la chicaluna.

-Lo sé, tipo duro.
-¿Entonces por qué no me rematas ahora mismo?
-¿Quieres morir? -se sorprendió ella.
-No. ¿Quieres contestar a mi pregunta?

Letto se encogió de hombros. Era un gesto que le quedaba bien. Lo utilizaba a menudo. Ése y levantar la ceja derecha eran sus favoritos... Aparte de fingir una pistola con el pulgar y el índice.

-No eres gran cosa ahora mismo. Estás herido.
-O sea, que es compasión.
-No. Es una inversión -retiró la mano, cansada de intentar ser educada-. Tienes motivos para vengarte de mí y tengo curiosidad por saber cómo lo harás. Y sobre todo, si puedes hacerlo. Además, me diviertes.
-¿En serio?
-Yo siempre hablo en serio.
-Pues verás la gracia que te hago cuando te abra esa bonita garganta tuya.

Ella se quedó callada un momento, pensando.

-"Eres una bomba de relojería" -susurró.
-Lo sé -asintió Kasdan.
-Era lo que me decía mi madre siempre -volvió a mirar al penoso ladrón-. ¿Sabes qué es lo que voy a hacer contigo, tipo duro?
-Sorpréndeme -masculló Kasdan, logrando levantarse solo y apoyándose en la pared del callejón.

La mano de Letto golpeó los ladrillos ennegrecidos cerca de su cabeza. Kasdan levantó la mirada y se dio de bruces con los penetrantes ojos de la asesina número uno de la ciudad (porque se había cargado a todos los demás a golpe de espada y sarcasmo) y por un momento pensó que si no tuviera ganas de arrancárselos casi resultarían bonitos. Era una belleza cruel y fría, sin embargo. Malo, malo.

-Voy a explotarte en la cara -dijo ella, mimando cada palabra.

Kasdan reprimió una risa.

-Yo soy más clásico, me conformo con rebanarte el cuello.
-Hecho.
-Hecho.

5 comentarios:

  1. Guau, qué trato escalofriante. Chicaluna y el clasicón son cada cual mejor.

    Y no sé si tiene sentido lo que digo en estos momentos, así que, resumiéndolo mucho: ¡Chachi!

    ResponderEliminar
  2. No se quien de los dos me enamoró más, si Kasdan o Letto, porque cada uno tiene su aquel, cada uno tiene fuerza y garra a su modo. Ambos están locos, a cual peor.
    Me encantó (:

    ResponderEliminar
  3. *Arqueo de ceja izquierda* (Si no fuera porque acabo de tener un curso de psicoalinalítica que me dice que todos los hijos están enamorados de sus madres y por eso estamos traumados... diría que estos están, en el fondo enamorados, pero sería demasiado raro, ¿qué no? A mí me gustan más si solo pelean para ver quién cede primero)

    Y yo tampoco sé cual mola más de los dos. Por el momento me quedo con el chico duro, que rebanar el cuello siempre me ha sonado bien ^^
    Genial, PîC ^^

    ResponderEliminar
  4. Cielo santo. Ambos me han facinado... y coinsido con Trinia, esa forma de relacionarse entre ellos es genial...

    ResponderEliminar